Marina García, participante de la tercera edición de La isla de las tentaciones, ha revelado en las redes sociales el desafortunado incidente que vivió durante sus vacaciones al visitar una playa de Cádiz. La sevillana, animada por muchos de sus seguidores, decidió disfrutar de una jornada en la cala de Roche junto a su padre, un amigo, su novio Jesús y Caramelo, su perra. Sin embargo, lo que iba a ser un idílico día en la playa se convirtió en toda una pesadilla cuando la joven fue desalojada supuestamente con malas formas por parte de un socorrista tras la llamada de un bañista al 112. (Lee aquí como Marina Garcia sorprende a todos contando cual es su nuevo negocio).
“Os cuento el suceso surrealista de ayer… Fui a la playa de Roche (una de mis favoritas de por aquí) porque muchos de vosotros me dijisteis que allí no tendría problema con Caramelo. Nos pusimos en una zona donde no había nadie cerca, colocamos nuestra sombrilla y allí tenía a Caramelo a mi lado todo el tiempo (echadita, sin molestar)”, comienza expresando en las redes sociales Marina.
La andaluza, en un momento dado, decidió acercar a su mascota a la orilla del mar para refrescarla y tratar de apagar ligeramente el sofocante calor de los últimos días, pero al regresar a la toalla la perra sufrió un nuevo episodio de sus problemas de estómago: “Muy poco, fueron tres gotas. Como eran tan líquido y no tenía nada en la mano en ese momento, cogí y eché tierra (removí la tierra)”, continúa expresando la joven.
Según ella, cinco minutos después llegó hasta su posición un socorrista a toda prisa: “Señorita, desaloje inmediatamente la playa. La policía viene en camino”, le espetó. “Acaban de llamar al 112 porque su perra ha hecho caca y lo has tapado con arena. Aquí no se permiten perros”, continuó, supuestamente “con un tono como si en ese momento yo estuviera cometiendo el peor de los delitos”. Ella trató de defenderse alegando, “un poco histérica”, que su perra no se había movido de la sombrilla, pero no tuvieron más remedio que abandonar el lugar.
Marina, que defiende que no busca “la razón de nada”, ha cargado contra la persona que llamó a las autoridades: “Ya tienes que ser mierda y tener una vida aburrida para joder de esa manera a una persona. Hay gente infeliz en este mundo. Lo mejor, que la persona que llamó me ha escrito desde una cuenta falsa diciéndome de todo. Desde aquí te digo que hubiera cogido toda su cara y la hubiera refregado por las gotitas de caca de mi perra”, expresó.
En su testimonio en las redes sociales Marina ha confesado además que esa persona habría buscado otra excusa para llamar a la policía: “Esa persona estaba solo pendiente de mí. Y hubiera llamado igualmente, por cualquier chorrada. Una persona con humanidad que ve cómo estaba yo de apurada no hace eso. La maldad es la peor enfermedad que existe y desgraciadamente en el mundo hay mucha”. Sus palabras, no obstante, han generado un amplio debate en la última publicación que ha compartido en la que aparece la joven con su perra. (Entra aquí para leer como te avergonzara saber porque La isla de las tentaciones tiene tanto éxito según un psicólogo).
