Uno de los momentos más duros en la vida de Gloria Camila fue el fallecimiento de Rocío Jurado, cuando solo tenía 10 años. Aquel episodio lo cambió todo. Su familia se rompió y su padre, Ortega Cano, se refugió en el alcohol. «Mi padre estaba destrozado tras la muerte de mi madre. Le cuesta mucho salir y ni él mismo sabía por donde tirar», ha confesado ella misma en ‘¡De viernes!’.
La joven ha confesado que tanto ella como su hermano eran conscientes de los problemas de su padre con el alcohol, algo que no sabían ni podían gestionar dada su corta edad. «Nosotros éramos conscientes de ese problema, intentábamos hablar con él y hacerle entender que ese no era el camino», ha contado. «Eres consciente, pero no puedes hacer gran cosa… éramos pequeños», asegura. Pero sus problemas le llevaron al momento más duro y trágico de su vida.
La joven ha confesado que tanto ella como su hermano eran conscientes de los problemas de su padre con el alcohol, algo que no sabían ni podían gestionar dada su corta edad. «Nosotros éramos conscientes de ese problema, intentábamos hablar con él y hacerle entender que ese no era el camino», ha contado. «Eres consciente, pero no puedes hacer gran cosa… éramos pequeños», asegura. Pero sus problemas le llevaron al momento más duro y trágico de su vida.
Tras el accidente, en el que el otro conductor perdió la vida, Ortega Cano estaba muy grave en el hospital. «Cuando fue mejorando me dejaron verlo. Estaba con respiración asistida», ha expresado Gloria Camila, con dolor, recordando uno de los momentos más complicados, pues el torero estuvo a punto de perder la vida. «Sale del hospital de una manera que tiene que hacer rehabilitación, estaba muy triste», ha relatado. «Él se siente y se ha sentido culpable toda su vida, hubiera preferido ser él quien muriese ese día», asegura su hija.
Tras recibir el alta, el diestro entró en prisión para cumplir condena por lo ocurrido, algo que volvió a poner la vida de la creadora de contenido patas arriba. Para Gloria Camila fue todo un shock. «Venía de que había estado mi hermano también», ha comenzado, hablando del paso por la cárcel de José Fernando, algo que tampoco fue sencillo para la familia. «No quería perder la cordura. Era golpe tras golpe, no te levantabas de una y venía otra», ha indicado con resignación.
Y en todo este duro trance, ni rastro de su hermana, Rocío Carrasco. En aquellos meses tan duros para ella, cuando además su hermano José Fernando ya empezaba a tener problemas, asegura que su hermana Rocío «nunca me llamó» y «nunca la vi», pese a que acudía con regularidad al hospital a visitar a Ortega Cano en su ingreso. «Ya que vas al hospital, podrías habernos llamado, sabiendo que estamos solos y con un padre en el hospital al que le están dando la extrema unción», ha dicho contundente en un claro mensaje directo a su hermana.
Reconoce varias llamadas a Rocío Carrasco
«Yo la he llamado alguna vez y no hubo respuesta», asegura la hija de Rocío Jurado. Su hermano, José Fernando, sin embargo, asegura Gloria que «nunca ha guardado rencor a mi hermana, de hecho él siempre ha luchado por recuperar y mantener esa relación, él tiene un gran corazón». Sobre los motivos de su distanciamiento, asegura que «a día de hoy sigo sin conocer la causa exacta, he buscado respuestas y no las he obtenido, yo no sé exactamente en qué punto se rompe mi relación con mi hermana». (Puedes ver aquí como n uno de los últimos juicios se descubrió la cantidad total que posee Rocío Carrasco en el banco).