La última gala de Supervivientes All Stars ha levantado una gran polémica. Jessica Bueno, visiblemente emocionada, recibió una propuesta del programa que muchos han calificado de “cruel” e “innecesaria”: si quería escuchar los audios de sus hijos, debía raparse el pelo al cero.
La escena, emitida durante Tierra de Nadie, ha provocado una oleada de críticas en redes sociales, donde cientos de espectadores han mostrado su indignación ante lo que consideran un chantaje emocional en directo. (Puedes ver aquí como piden la expulsión fulminante de Yaiza por lo que ha hecho).
💔 “Qué crueldad jugar con los sentimientos de una madre”
En X (antes Twitter), el comentario más viral resume el sentir general:
“Qué crueldad jugar con los sentimientos de una madre, haciendo chantaje de poder escuchar a sus hijos a cambio de raparse la cabeza, y a los tíos solo les ponen un taparrabos. Las penitencias no son equitativas entre hombres y mujeres.”
Las palabras acompañaban una imagen de Jessica entre lágrimas, diciendo “No, no, no” mientras trataba de contener la emoción. Para muchos, el momento fue tan incómodo como injusto.
⚖️ Desigualdad y doble rasero
La polémica no solo se centra en la dureza de la propuesta, sino también en la diferencia de trato entre concursantes. Varios usuarios han señalado que mientras a las mujeres se les imponen sacrificios físicos o estéticos, a los hombres se les proponen pruebas mucho más leves.
“Las penitencias no son equitativas entre hombres y mujeres”, repetían muchos comentarios que convirtieron el hashtag #TierraDeNadieAllStars7 en tendencia durante la noche.
💬 “Vergonzoso, esto no es entretenimiento”
Otros espectadores fueron aún más contundentes:
“Estos son los que dan ejemplo de moralidad? Le dicen a una madre que si quiere escuchar a sus hijos se rape al cero. Locura la hipocresía de este país.”
El malestar fue tal que incluso perfiles conocidos en redes como Tu Ludópata Preferido escribieron:
“Al menos Zonagemelos van de cara, estos son mil veces peores.”
📺 El programa, en el punto de mira
De momento, la organización no se ha pronunciado sobre la controversia, pero la imagen de Jessica Bueno llorando y negándose a raparse ya se ha convertido en uno de los momentos más comentados de la edición.
Lo que para algunos fue una simple prueba televisiva, para muchos otros ha sido una muestra de desigualdad en pleno 2025.

