Lucía Sánchez es recordada por muchos por su paso por tercera edición de La isla de las tentaciones, donde acudió con Manuel, su pareja en aquel momento. Además de dejar para el recuerdo la frase «la manita relajá’», su relación terminó en República Dominicana por los comportamientos que vio durante su estancia allí. Pocos esperaban que meses después comenzase una relación con Isaac Torres, uno de los tentadores con los que apenas había tenido acercamiento, pero lo suyo terminó en un embarazo que dejó a todos sin palabras debido al poco tiempo que habían tenido para conocerse. Esa relación no llegó a un buen final y la gaditana sigue recordando algunos de los malos momentos que pasó con él, como por el periodo de asexualidad que vivió tras romper.
La joven ha dejado claro ante los espectadores de mtmad que la suya fue una relación tóxica y que no guarda para nada buen recuerdo de él, tanto que admite que ha tardado cuatro años en superar los traumas que le causó el tiempo que pasaron como pareja. Rompieron antes del parto, por lo que la recta final del embarazo, el nacimiento y los primeros días los vivió con la ayuda de su familia, pero sin el padre de la niña que acababa de llegar al mundo. Esa fue solo una de las consecuencias a las que tuvo que hacer frente, ya que el resto las ha tenido que ir superando poco a poco con el paso de los años y la ayuda de terapia.
Aunque no ha dejado de trabajar como influencer y también llegó a ganar GH DÚO, pocos conocían el infierno que ella tenía en su interior. Aunque tardó en darse cuenta, Lucía comprendió que no era normal lo que estaba pasando en su vida. «Me volví completamente antisocial y asexual», confiesa en su canal.
«Había veces que aunque estuviera soltera o no, por mucho que lo intentara era incapaz de fijarme en alguien, de quedar con cualquier hombre o quedar para tomar algo», explica a sus espectadores. Por suerte, contaba con ayuda profesional, por lo que ha podido superar este tema: «Con la psicóloga lo hablaba y me dijo que el camino era trabajar en mí, una vez estuviera bien conmigo misma eso iba a salir solo y así ha sido».
Según ha contado, el motivo de este problema se debe a algo muy concreto: «La causa de todo esto creo que viene cuando dos personas se meten en una relación muy tóxica. Cuando cogen a una persona que es muy recta como yo con mis pensamientos de pareja y todo eso pues no me salgo de ahí. La relación tóxica me ha llevado a estar centrada solo en esa relación, sea buena o sea mala».
Lejos de darse cuenta de todo, Lucía Sánchez admite que ha tardado tiendo en darse cuenta de que sufría este problema por culpa de su ex pareja. «Esto llega a ser una enfermedad de la mente como por ejemplo los problemas alimenticios, que las personas se ven en el espejo de una manera que no son. A mí me pasaba, yo me veía bien y la gente me decía ‘se te nota que estás triste’», explica.
Por suerte ya ha conseguido superar su problema con ayuda profesional y que ya ha conseguido volver a «relacionarse con normalidad» con otros chicos. Gran parte de la culpa de este buen momento lo ha vivido gracias a Álvaro Boix, su última pareja, con la que ha roto recientemente, aunque le agradece el tiempo que ha pasado con él. (Entra aquí para conocer la nueva ilusión de Lucia Sánchez tras su ruptura con Álvaro Boix).