Mónica Naranjo a contado en una entrevista a sálvame cómo vivió el concurso desde dentro. Comenta que la realidad superó a la ficción y que muchas noches iba a control a ver qué estaba pasando, puesto que necesitaba saber que sucedía porque se estaba volviendo loca con todo lo que ocurría. Cuenta que el propio programa le ha servido de aprendizaje.
La presentadora comenta que lo ha pasado fatal en muchos momentos debido a la dureza de las imágenes. Ella piensa que lo que pasó es que los participantes se dejaron llevar porque fueron a una isla y se encontraron en una burbuja fantástica. También dice en la entrevista que se identifica con José y Adelina.
Monica ha comentado cómo fue la famosa noche del grito de Christofer, confiesa que esa noche paso miedo porque vio a Christofer fuera de si y a eso se le suma que llevaba varios días malito y que no comía. Cuando vio las imágenes que le iban a enseñar se puso en retaguardia y cuando por fin las visualizo, Mónica tuvo ganas de levantarse detrás de él y darle su apoyo pero no pudo. Ella recuerda el momento con tensión y miedo por lo que pudo haber pasado.
Tras todo esto Mónica Naranjo dio un abrazo a Christofer a la mañana siguiente porque lo vio devastado.